Ruta: Subida al
Bisaurín desde el refugio de Lizara por
el Collado del Foratón, ruta
normal al Bisaurín
Fecha: 14-3-04
Participantes: Javier & Elena,
Manuel,
Carolina, Víctor
& Asunción, Santi & JorgeG, Ricardo, Javi,
Lola, Elvira,
Karmelo
Comentarios: El Bisaurín es un pico
relativamente
fácil en verano, aunque con
una subida final de pendiente
fuerte y sostenida. En invierno es fácil con buena nieve, y delicado
si la pala final está
helada. Al ser el pico más alto del Pirineo Occidental, su ascensión,
tanto a pie como en esquí de
travesía, es un
clásico de la zona.
Este
año Javi Kroketa se hace cargo de
la
promocional de esquí
de travesía del club Montañeros de Aragón con gente que acaba de
aprender,
por tanto le
acompañamos en "la tarea", aunque de forma un poco menos
altruista
de lo que podía parecer, ya que también era un
pico que nos apetecía.
En Puente la Reina seguimos la carretera hacia Echo, y a medio camino tomamos el desvío a la derecha de Aragüés del Puerto, pasado el cual una carretera en relativamente buen estado, aunque puede haber algunas piedras caídas, lleva hasta el refugio (geolocalización para llegar al lugar de inicio).
El refugio
de Lizara (foto) , 1.540m, dispone de 75 plazas y está
muy bien, de reciente construcción sigue los cánones de los nuevos
refugios con
varias
habitaciones de tamaño moderado, y baño en cada
una de ellas. Teléfono: 974 348 433, emilio: info@refugiodelizara.com,
web:
www.refugiodelizara.com,
webcam y reservas.
La noche ha estado increíblemente estrellada y el día es excelente, completamente despejado. Muy lentos y tranquilos tardamos un buen rato en prepararnos para salir.
0:00 Partimos a las 9:10, tomando una senda
a la izquierda del refugio que sube por detrás de éste,
accediendo a una pista hacia la derecha. El camino al
collado del
Foratón está marcado como GR-11.1.
Empezamos porteando los esquís, pero enseguida algunos se los ponen,
aunque
otros preferimos
portear un poco más para evitar las piedras del camino.
Salida con abundante nieve por la derecha del
refugio
0:08 Subida la loma de detrás del refugio vemos al fondo el Collado del Foratón, hacia el que nos dirigiremos. Para evitar descender el camino da un amplio rodeo por la derecha (por una pista en verano), para realizar un largo llaneo por nuestra derecha del valle. El grupo empieza a dispersarse porque entre los nuevos hay desde quienes tienen poca experiencia en esquí de travesía pero están fuertes, hasta quien es la primera vez que lo hace.
Avanzamos hasta plantarnos
al pie del collado. Es el momento en el que los "novatos" en travesía
pueden demostrar sus
vueltas maría, que obviamente se les resisten en salir, para subir
la fuerte pendiente.
1:30 Llegamos al Collado del Foratón, 2.032 m. Superada la fuerte pendiente ya sólo queda .... otra pendiente más larga y más dura a la derecha. Foto del grupo en el collado del Foraton.
La amplia pala de ascenso
permite ganar altura haciendo largas
zetas, que con la nieve blanda la cosa resulta fácil, y
sólo hace falta
la potencia y resistencia suficiente. Otra cosa es
cuando está
helado, en cuyo caso puede ser necesario quitarse los esquís
y subir
con crampones, especialmente a dos tercios de la subida donde la pala
se estrechan por unas rocas, poniéndose todavía un poco más pendiente.
Subimos muy muy despacio zigzagueando. Coincidimos con una persona que sube a pie, y que se queja de que la huella pedestre sube directa, sin descanso, en lugar de ser más relajada haciendo zetas, pero abrir nueva huella sería todavía más duro.
Pala de subida al
Bisaurín desde el collado del Foratón
Empieza a haber alguna nube y a medida que subimos se van instalando en la cima.
Llegamos al final de la pendiente, a lo que parece la cresta cimera, ya sólo queda ... otra pendiente hacia la derecha (Oeste), pero ésta ya muy cortita y suave. Con la nieve actual hemos subido muy bien con esquís. La niebla es ya total, se supone que la cumbre está delante pero no se ve nada, hasta que estamos allí mismo.
3:55 (despacio)
Pico Bisaurín,
hemos subido muy tranquilos, lentos, sin prisas, y
enseñando/aprendiendo la técnica. Se supone
que hay muy buena vista, pero lamentablemente no se ve nada
de nada. También dicen que en la cumbre hay una cruz, pero
sólo
vemos asomar unos cm. de un tocho de hierro. Sopla el viento y hace
frío,
así que no montamos ninguna fiesta en la cumbre, a
pesar de
que llevábamos unos "empanadicos" de calabaza y manzana que
habíamos comprado
para la ocasión.
La bajada
esquiando
razonablemente bien, al principio un poco incómoda porque
la nieve estaba muy rota de tanta gente y tanta huella, pero poco antes
del collado ya
se podía elegir nieve virgen, y entonces una
gozada.
De vuelta en el collado unos deciden bajar y otros nos dejamos tentar por seguir la cresta hasta el Puntal Alto de lo Foratón, y después bajar por unas hermosas palas nevadas. Ricardo, JorgeG, Manuel y yo ponemos focas nuevamente y empezamos la segunda subida. Nos picamos un poco, y si bien la ascensión al Bisaurín fue muy muy lenta y tranquila, esta subida es muy muy rápida, de modo que llegamos al Puntal del Foratón en 15 minutos, asfixiados y completamente al límite de fuerzas, de modo que si la cima midiera 5 metros más de altura hubiéramos caído rendidos antes de llegar.
Bajamos por la cresta SurEste hasta llegar a una buena zona para bajar hacia el valle. La nieve está blanda y resulta un poco pesada, así que entre caída y caída disfrutamos de la bajada, hasta que llegamos a una zona en que los esquís chirrían de tantas piedras que se comen. Afortunadamente Javier, desde el otro lado del valle nos va dando indicaciones por walkie-talkie dirigiéndonos por las zonas mejor innivadas.
Si se baja en esquís, y no se va al Pico del Foratón, poco antes de llegar al llaneo del Collado de lo Foratón conviene desviarse ya hacia la izquierda, evitando perder demasiada altura que después exija pegarse una generosa remada, aunque si hay bastante nieve, y durante el ascenso se ha mirado bien, es posible que puede realizarse el descenso girando a la izquierda bastante antes del Collado.
Una vez en el fondo del valle cargamos esquís a la espalda, una pequeña subida y nos dirigimos al refugio, donde disfrutamos de unos huevos con patatas y longaniza.
Durante la excursión oímos un profundo silbido y al levantar la cabeza vimos a unos 50m. un enorme pájaro de varios metros de envergadura dando espectaculares recortes y rozando las agrestes piedras del Bisaurín; era un planeador de vuelo sin motor.
Perspectiva general de la ruta de
subida al Bisaurín desde el Refugio de Lizara