Ruta: Subida al Aitzgorri
desde Arantzazu
Fecha: 1-1-21
Pese a los avisos de precaución por mal tiempo, como siempre mucha
gente subiendo a este pico. El paisaje estaba espectacular, lleno de
nieve, con los árboles "cayéndose" por el peso de la nieve y el hielo.
Variada "fauna" por Urbía, con gente
con zapatillas, pese a la nieve y los avisos de peligro, familias
cargando trineos más de una hora desde Arantzazu (aunque hay sitios
mucho mejores y cercanos), traveseros y raquetistas, y sorprendente ver
unos ciclistas en el mismo Urbia, con medio metro de nieve, empezándo
la
bajada
por la ruta normal pese a su pendiente con la nieve endurecida por el
paso de la gente. Pero quien más me gustó, en la subida desde Urbía,
fue un
precioso ratoncillo juguetón,
minúsculo y monísimo, correteando por la nieve, que
cuando lo vi empecé a sacarle fotos, y más fotos a medida que se
acercaba, hasta que la sorpresa es que vino a posarse junto a mi bota.
Subida final a Aitzgorri
Y por supuesto, como dice todo el mundo, os deseamos los mejores
deseos para el 2021. Pero a diferencia de lo que se lee en todas
partes, no deseamos olvidar el 2020, porque
no se puede deshacer lo que ha pasado, y de todo se puede aprender si
abrimos nuestras
mentes. Aunque las muertes no tengan marcha atrás, y parte del desastre
económico no sea recuperable, preferimos quedarnos con las partes
positivas del año que acaba de terminar. Seguro que todos podemos
encontrarle algo bueno, como esas personas especiales que hemos
conocido; algunos
por fin habrán establecido relación con esos vecinos que habían visto
mil veces pero con los que
nunca habían hablado; muchos han descubierto agradables paseos en su
pueblo, o preciosas excursiones y paisajes espectaculares sin ni
siquiera salir de su provincia; hay quienes han
desempolvado y engrasado su bicicleta para descubrir una nueva
actividad
que les encanta y les sienta bien; se ha visto mucha gente que no solo
se han puesto el traje de "solidarios" en navidad sino que lo han hecho
durante meses, y quizás algo les quede permanente; hemos descubierto
nuestra
capacidad de "resistir" con paciencia las situaciones estresante o las
"canciones repetitivas"; muchos han aprendido a cocinar, fabricar pan y
hacer repostería; todos hemos aprendido algo de nosotros mismos ante
una situación extraordinaria; hay más gente que nunca haciendo deporte,
que empezaron con una simple tabla de ejercicios en casa y han acabado
con
largos paseos y excursiones de montaña; se ha roto la rutina de hacer
lo mismo semana tras semana y año tras año; por primera vez en la
historia este final de año no hemos tenido que aguantar en los medios a
los timadivinadores dando sus previsiones del próximo año,
porque para quien no lo supiera ya, ha quedado claro que solo se
dedican a las estafas; y con tanto papel higiénico se supone que nunca
la gente
habrá llevado el culete tan
limpio ;-)
Y así trabajemos este 2021 activamente por ese optimismo, apoyando a los científicos que buscan la verdad frente a los manipuladores que buscan la fama, a los sanitarios que se arriesgan para salvarnos frente a los covid.iotas que se oponen a llevar mascarillas o mantener distancias, a los que creen imprescindible protegerse para proteger a los suyos frente a los que creen que lo imprescindible son las fiestas y socialización masiva, a los que se esfuerzan en mantener una tienda o una empresa con sus puestos de trabajo frente a los que solo venden kabreo y pesimismo para ganar en río revuelto, a las vacunas que una vez más salvarán a la humanidad frente a konspiranoias y productos mágicos.
Y que podamos disfrutar de las montañas con el máximo respeto por
ellas.