Ruta: Circular saliendo del pueblo de Anento hasta
su Aguallueve, estirando la caminata hasta el Aguallueve de Arguilay.
Fecha: 2-11-18
Participantes:
Loren, Teresa, Karmelo
Comentarios: Camino senderista sin grandes
dificultades. Se puede hacer el muy corto paseo circular del Aguallueve
de Anento, o estirarlo bastante hasta el Aguallueve de Arguilay.
Tras dejar el coche en el amplio aparcamiento que hay a la entrada del pueblo (geolocalización para acceder al punto de salida), caminamos unos pocos metros carretera abajo, hasta llegar a la Oficina de Turismo, donde nos atienden muy amablemente, y desde donde empezamos la caminata a las 10:34
Track de la vuelta al Aguallueve de Anento y el Aguallueve de
Arguilay
0:00 Cogemos la calle al otro lado de la plazoleta de
la oficina de Turismo, a
la izquierda según hemos bajado por la carretera, dirección izquierda.
0:01 Enseguida llegamos a una bifurcación, donde ambos lados llevan
al Aguallueve, siguiendo nosotros el de la derecha,
y que si hiciéramos la vuelta breve (2km), volveríamos por la izquierda.
0:05 Cogemos la senda a la izquierda.
0:06 Seguimos al frente,
dejando a la derecha un desvío que sube al Torreón Celtíbero
(que también visitaremos después).
0:17 Llegamos a la charca
del Aguallueve, que rodeamos por la derecha.
0:18 Aguallueve de Anento, curioso derrame de
agua, con musgos y vegetación, y que pese a su fama, y precisamente por
ella, nos
defrauda, siendo bonito, pero nada especial.
0:21 Siguiendo al frente volveríamos al pueblo de Anento,
completando la vuelta
breve, pero para ampliarla nos vamos a la derecha, hacia el Torreón
Celtíbero. La senda contornea por dentro el circo de altas paredes que
rodea el Aguallueve, para poco después de pasar bajo unas vías de
escalada, subir por unas escaleras
a la parte alta del circo. Una vez arriba seguimos al frente/derecha.
0:36 Torreón Celtíbero,
solo quedan las ruinas, no habiendo nada de especial interés, salvo en
todo caso las vistas hacia Anento. Quienes no quieran estirar más el
paseo se pueden volver por el mismo camino, y terminar la vuelta breve.
Tras pensarlo un rato porque había llovido algo, y dudando del
tiempo, decidimos continuar, reservándonos la retirada si
empeoraba. Para ello seguimos al
frente
(SurOeste), continuando el contorneo del barranco por arriba.
0:47 Seguimos al frente, dejando una senda que baja a la derecha, y
que es la que
habíamos visto de camino al
Aguallueve, que subía al Torreón Celtíbero.
0:59 Dejamos un desvío a la derecha, que lleva a la senda que contornea el barranco por su borde, y que disfruta de mejores vistas, siguiendo nosotros la más cómoda y evidente pista. Hacemos algunas paraditas para recoger unas pocas almendras en diversos almendros abandonados.
1:28 Llegamos al fin de la pista,
y seguimos contorneando el bosque por
nuestra izquierda.
1:44 Al llegar a una casa semiderruida, donde además termina el bosque, iniciamos el descenso a la derecha. Bajamos en fuerte pendiente por fuera de caminos, y con tendencia a la izquierda.
Descenso al camino inferior,
contorneo del Barranco de Arguilay, y descenso al Bco.
1:58 Pillamos la senda que contornea el barranco sobre los cortados, y seguimos a la izquierda. La senda, que tiene unas marcas de pintura azul, rodea el final del barranco hasta acceder al otro lado, donde está el descenso.
2:23 Cuando la verticalidad cede en un canal muy tumbado, muy fácilmente
descendible y muy evidente,
bajar hacia la derecha. En nuestro caso está mojado, y hay tramos
resbaladizos. Aquí
encontramos un nogal salvaje, que nos regala sus nueces.
2:40 Una vez abajo, en una bifurcación nos desviamos momentáneamente
a la derecha.
2:41 Aguallueve de Arguilay,
muy diferente, y quizás más bonito que el de Anento. Paramos 5', y
volvemos a la bifurcación para seguir por el otro ramal, que avanza por
el fondo del barranco.
2:50 Área recreativa de Arguilay,
merendero con parrillas de barbacoa, columpios, y
una charca vallada, que tiene el aspecto de estar algo
abandonado. Hasta aquí llega una pista,
la cual seguimos. De camino, encontramos más almendros (abandonados),
que
nos permiten llenar los bolsillos, y poco después alguna vid fuera de
campos, que nos permite coger un racimo y seguir caminando comiendo
uvas. Poco después nueva sorpresa, al encontrar un peral en el lateral
del camino con diversas peras por el suelo, cogiendo alguna para seguir
comiendo por el camino (y pensar que hay quien en las caminatas solo
come barritas energéticas ... ;-). Y más adelante un endrino, donde
nueva recogida para un amigo que hace pacharán. Así que fue una
excursión "muy productiva".
Pero además también hubo encuentros animales, con varias manadas de
corzos, y una cría de jabalí muerta en medio de la pista.
3:36 Legamos a un cruce de pistas donde giramos a la derecha,
señalado como "Manantiales de
Aguallueve". Algún nogal adicional nos permite comer algunas
nueces por el camino.
4:01 Anento. Después de la
vuelta, aprovechamos para visitar el pueblo, y su castillo en lo alto.
Es un pueblo majo, con algunas calles cuidadas, pero algo artificial y
algún adorno marinadorizado1,
teniendo además algunas
restauraciones eccehómicas2.
Particularmente nos resultó demasiado
sobrevalorado, como para ser considerado uno de los pueblos más bonitos
de España (habiendo muchos otros más bonitos en Aragón), aunque se
entiende, teniendo en cuenta que la "Lista Oficial de los Pueblos Más
Bonitos de España" no es más que un negociete exclusivamente
económico, donde para estar en dicha lista, lo primero y más
importante, más que ser
bonito, es pagar para ello.
I marinadorizado:
Dícese de la
decoración excesiva y artificiosa, que
a veces rayando en lo hortera, puede llegar a resultar algo estridente
y
de dudoso gusto.
2 eccehómica:
Estilo de restauración de brocha gorda (muy gorda, casi
a escobazos), que no respeta el original, destacando su incoherencia en
exceso (aunque
se haga de buena voluntad)