Ruta: Ascensión desde Canfranc, pasando por la
gruta helada
Comentarios: zona muy bonita,
tranquila y
recomendable. La visita
de la cueva helada en primavera puede ser espectacular, pero
dependiendo
de las fechas y el año puede haber nieve por el camino. El ascenso
final
al Pico Lecherín tiene una trepada algo complicada. A tener cuidado si
hay nieve, necesitándose crampones y piolet (si no ver la reseña de
la ascensión por Aísa)
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Fecha: 16-6-02
Participantes: Karmelo, Juan, Elvira
Unos meses antes lo habíamos intentado, pero tras
perder mucho
tiempo intentando vanamente conseguir la llave de acceso a la pista de
aproximación, lo dejamos pendiente. Según nos
explicaron
tuvieron que cerrar la pista porque subían demasiados
gamberros
que lo destrozaban todo, incluso habían pegado fuego a la
puerta
de alguna chabola. Ojalá cerraran todas las pistas si con
ello se
evitara cierta gentuza en el monte.
Esta vez decidimos subir a pie y por otra ruta,
saldríamos desde
Canfranc pueblo. Hasta justo la semana
anterior habíamos
estado
haciendo esquí de montaña y esta sería
la primera
salida de la temporada a pie.
Aparcamos en el pueblo y partimos caminando (los tiempos mostrados
son bastante lentos, siendo más normales los mostrados más abajo en una
excursión posterior).
Inicio del camino en Canfranc pueblo
0:00 El camino
avanza
en gran medida por el GR11-1 lo que facilita
seguirlo. Justo a la entrada del
pueblo
según se viene de Zaragoza, a la izquierda
de la carretera
asciende
el camino por encima de un contrafuerte de cemento. En ese punto las
marcas
rojiblancas las encontramos medio borradas, pero un poco más arriba un
cartel nos indica que estamos en el GR, e informa "Ref. Lizara
6h45' ; Gabardito 2h" (tiempo, al menos el de Gabardito, muy
exagerado). Se pasa junto a unas bordas y
comienza
el camino ascendente. La amplia senda zigzaguea por un bosque
tupido.
0:33 Pasamos junto un cartel que marca un desvío a la izquierda a "Villanúa",
y nuestro camino que continúa por la derecha "Gabardito 1h"
(el tiempo ahora es más razonable, y eso que subimos despacito).
0:40 Llegamos a una pista,
que la
seguimos
hacia la derecha
(conviene fijarse en el lugar para la vuelta). Un cartel nos vuelve a
marcar Villanúa pista abajo, "Canfranc Pueblo" por donde
venimos, y "Gabardito" hacia donde vamos. La
pista
sube poco a poco por bosque.
0:50 Fuente de los Abetazos. Por el camino, al
menos hasta la Majada
de Lecherín Bajo, hay bastante agua, ya que además de las fuentes
cruzaremos algunos riachuelos.
1:25 Tras una larga
subida, de repente el bosque finaliza encontrándonos con un
paisaje
precioso, la Majada de Gabardito. Bonitas vistas de
montañas y prados verdes,
resultándonos
más atractivo si cabe teniendo en cuenta que tras muchos
meses de
esquí de montaña nos hemos acostumbrado a los
grandes espacios blancos, y aquí domina el verde brillante.
Poco después pasamos junto a una cabaña
forestal, que
sirve de refugio libre. Hacia la derecha podemos ver ya los Mallos y Pico Lecherín y a su derecha el
Tortiellas.
Mallos y Pico de Lecherín, y Pico de Tortiellas vistos desde la
Majada de Gabardito
Continuamos el camino GR-tizado, cruzando prados, pinares y
riachuelos
cristalinos, prácticamente solos en un día
excelente. En algún momento puntual las huellas de la senda se diluyen
al cruzar algún prado, debiendo seguirse llaneando, habiendo también
alguna
estaca para marcar la ruta. Tras cruzar un par de torrentes, llegamos a
otro riachuelo donde las marcas de GR ascienden por la izquierda, para
cruzar el río poco más arriba, conviene estar atentos a las marcas.
2:45 Llegamos a un río que lleva más agua que los anteriores, y que cruzamos sin problemas saltando por las piedras. Tras subir un poco podemos ver ya la Majada de Lecherín Bajo, una amplia pradera verde, con excelentes vistas. Ya sólo la subida hasta aquí merece la pena como paseo, habiendo además bastantes florecillas.
2:55 Llegamos a una segunda cabaña,
también
abierta
como refugio
libre aunque algo descuidada, situada en medio de la Majada. Detrás del
refugio hay un
abrevadero con
una
fuente, donde paramos un buen rato.
El GR continúa
al frente, ascendiendo después
hacia la izquierda en
dirección al refugio
militar López
Huici y los Lecherines, pero nuestro objetivo en este momento es la
gruta helada, por
tanto
dejamos nuestro fiel compañero rojiblanco, y tiramos hacia
la derecha.
Subida a los Lecherines desde la cabaña
El
camino enfila un canal muy marcado,
al pie del pico
Tortiellas,
en cuya
cresta de la derecha vemos multitud
de horrorosas estructuras extrañas
que no adivinamos
qué pueden
ser. Comenzamos el ascenso por el canal
pasando delante de unas
paredes con un curioso choque de estratos superpuestos, dignos de un
libro para la
enseñanza
de geología. Empezamos a ver marmotas, cuya
presencia nos acompañará
durante todo el día. Por el prado vemos también
una grandísima
cantidad de plantas de lirios sin flor, que nos tientan a volver en
unas semanas para disfrutar del maravilloso paisaje que se debe formar
cuando
florezcan y lo cubran todo. También hay narcisos
y muchas otras flores.
Subida a la gruta helada desde la Majada de Lecherin Bajo
4:15 Ascendemos el canal hasta que casi se acaba, y cuando se
divide en dos
cogemos el desvío de la izquierda, pudiendo haber
algún hito que lo marca.
Allí podemos ver más
de cerca
alguna de las horrorosas estructuras que recorren toda
su
cresta derecha, un verdadero atentado paisajístico, que además de la
contaminación visual también contaminan auditivamente porque con el
viento
hacen
un molesto ruido que se oye desde muy muy lejos, sonando como un
avión cayendo
en picado. Seguimos el
camino, subimos
un poco, bajamos tirando hacia la derecha
y en una explanada rodeada de paredes de repente
empezamos a
sentir como oleadas de
frío
en un día extremadamente caluroso.
Desvío izquierdo del canal. Al fondo la cresta del Pico Tortiellas
4:30 Nos plantamos frente a la gran
boca de la gruta
helada, en la pared de la derecha. Desde fuera ya se ven
dentro un par de columnas de hielo. Paramos a
comer,
y cuando terminamos cogemos linternas y nos ponemos pantalones
largos,
chaqueta y guantes para poder entrar. Hay que ir con cuidado porque el
suelo y las rocas están medio heladas y patinan. El
espectáculo
es muy llamativo, columnas y estalactitas de hielo a pocos metros de un
ambiente asfixiante de calor. El contraste de luz con el exterior hace
que apenas podamos ver dentro a pesar de las linternas, pero poco a
poco
nos vamos metiendo. Cuando estamos en la segunda galería
oímos
un gran estruendo en la galería de entrada que nos
sobresalta. Al
salir comprobamos que una altísima columna de hielo de medio
metro
de grosor ha caído, así que conviene ir con cuidado mirando arriba de
que no nos caiga ninguna estalactita de hielo.
Cascada en la gruta helada
0:00 Tras aproximadamente una hora en la cueva y una paradilla a comer reemprendemos el camino hacia el Pico Lecherín. Para evitar una gran vuelta bajando de nuevo a la Majada, bajamos un mínimo hasta poder tirar hacia la derecha para cortar haciendo un flanqueo sin perder altura. Avanzamos así hasta que llegamos a una barranquera, la del paso de la garganta de Borau, que bajamos, subimos y empezamos el ascenso dirección a los Lecherines. El camino es duro, es un terreno kárstico muy irregular, con agujeros, simas y rocas ásperas y afiladas como cuchillos. Aunque el pico parecía cerca se resiste y perdemos mucho tiempo hasta llegar al collado entre el Pico y los Mallos de Lecherín. Es bastante tarde y me adelanto.
Mallos de Lecherín y
Pico Lecherín, vistos desde las cercanías de la gruta
2:00 Collado de
Lecherín.
Si los mallos
ya eran atractivos vistos desde el valle, todavía resultan
más
vistosos desde aquí y su vista posterior (vista
invernal de los Mallos de Lecherín) además resulta
curioso el cambio
de tipo de roca entre la caliza por la que subimos y la arenisca de los
mallos. La ascensión al Pico se ve muy evidente por un canal,
que parece no tener mucha dificultad. El camino empieza andando, poco
después se pone un poco
más
difícil y hay que trepar, y cada vez se pone peor con pasos
cada
vez más difíciles, no recomendable para gente que no
haya hecho
algo de escalada. Para colmo hay mucha piedra suelta, peligrosa para
quien
sube y más para quien va por debajo. De todas formas el tonto
orgullo, tontas ansias de cima, o tonto lo
que sea
me hace que a pesar de ir sólo arriesgue un poco y siga adelante, pero
con algunas dudas por la subida
y más dudas por la posterior bajada; la adrenalina empieza a
notarse (no soy ningún friki). Vista invernal del
corredor. Así llego hasta el final del canal, cerrado por una roca
empotrada entre
las dos cimas que forman el pico; decido subir a la
izquierda
simplemente porque es la que veo más accesible, pero no sin
algo de dificultad.
2:25 Me planto en la cumbre del Pico de Lecherín, donde hay un buzón plateado en forma casa, la cima de enfrente de altura semejante tiene también un hito de piedras. Parecía que el ascenso sería rápido pero he tardado casi media hora desde el collado. Vistas invernales: Pico de Aspe y Sombrero (zoom del Aspe), Collarada y circo de Ip, Midi de Ossau, Infiernos, Garmo Negro y Argualas, Mesa de los Tres Reyes y Anie, Palas, Balaitous y Frondiellas.
Para la bajada, viendo los problemas de la subida, decido arriesgar e intentarlo por otro canal que está un poco más a la derecha (según se baja) y que poco después se junta con el principal. Tras las dificultades de la subida, y el temor para la bajada, me acaba resultando más fácil de lo esperado. Cuando me cruzo con Juan y Elvira ascendiendo al principio del canal les recomiendo que no suban por su dificultad y por la hora que era.
Es muy tarde y damos por hecho que se nos hará de noche antes de llegar al coche, por tanto empezamos el descenso sin dilaciones. Adivinamos abajo un poco a la izquierda la gran pradera de la Majada Lecherin Bajo y nos encaminamos directos hacia ella. La pendiente es muy fuerte y rompepiernas, hasta que topamos con el camino del GR que lleva al refugio militar López Huici. Ya sobre el camino cogemos un buen ritmo y bajamos muy rápido. La parte de la pista por debajo de la Majada de Gabardito se nos hace muy larga, pero al final llegamos a los coches antes de lo esperado, en 3h 15' desde la cima.
Acabamos agotados, y con las piernas cargadas, pero al final llegamos de día y estamos muy satisfechos por la excursión.
Fecha: 5-6-10
Participantes: Blanca, Miguel Ángel, Carolina, Karmelo (en el
Tortiellas con los Lecherines detrás)
Estando descrita antes la subida hasta la cueva de Lecherín sólo
se indican los tiempos, éstos más normales que los de la excursión
anterior (bastante tranquilos).
00:00 Salida a las 10:03 desde Canfranc-city
0:34 Llegada a la pista, tomándola a la derecha
1:00 Majada de Gabardito
2:00 Majada Lecherín Bajo
2:25 Entrada canal
3:00 Desvío izquierda del canal
3:11 Gruta helada de Lecherines
0:00 Hay bastante nieve, y aunque llevamos crampones nos da pereza ponérnoslos, así que subimos buscando las zonas donde afloren más piedras. La ladera final está un poco más empinada y la caída es un poco peor, así que cogemos los piolets y tiramos arriba.
0:40 Pico Tortiellas. Las vistas son muy buenas
pese
a que se ha cubierto un poco, llamando la atención a nuestros pies la estación de Canfranc. La bajada
la hacemos por el mismo camino,
sólo que para el descenso lo que buscamos es la nieve que facilita la
bajada, y lo que evitamos las piedras.
En la subida a la gruta helada de Lecherín por la evidente canal, llega un momento que se divide en dos partes. La parte izquierda nos lleva a la gruta y la parte derecha hasta el collado del pico de Peña Blanca (el que tiene esas horribles estructuras para evitar que se formen cornisas de nieve).
Desde este collado bajando hacia el NE, siguiendo marcas blanqui-amarillas, se alcanza una instalación meteorológica. Aquí empieza el Paso del Sarrio que nos lleva al refugio del mismo nombre. La travesía es aérea y delicada, sobre todo con nieve o lluvia, pero siguiendo las marcas no debería de presentar muchos problemas. No hay que bajar hacia Canfranc Estación (Este) sino seguir dirección Norte hasta alcanzar la cabaña.
Una vez en la cabaña, estamos en la cabecera del barranco de Estivellas y por muy buena senda se baja a Canfranc estación.
Pablo, 13-7-14